Sobre una meseta, a poca distancia de las faldas del Volcán Mombacho, se encuentra el municipio de Diriomo, que posee una apacible ciudad con mucho valor cultural e histórico y comarcas con riqueza natural y pobladores con un gran calor humano que los atenderán amablemente en sus humildes casas
Diriomo es conocido nacional e internacionalmente, como “El pueblo brujo o la ciudad de los brujos”, esto se debe a que este pueblo es depositario activo de los conocimientos, creencias y sabiduría ancestral que ha conservado durante siglos, uno de los más importantes acervo de nuestro patrimonio cultural los saberes y las prácticas sobre la medicina tradicional y popular.
Los saberes y prácticas ancestrales de los rituales, ceremonias y conocimiento de las propiedades curativas de las plantas y su uso para la salud humana y de animales, es un patrimonio inmaterial de incalculable valor de los diriomeños y del pueblo de Nicaragua.
Estas prácticas han sido transmitidas por medio de la tradición oral, prácticas y costumbres de los pueblos indígenas, transferidas de padres a hijos. Nicaragua es de los pocos países en el mundo que incluyen de manera oficial la medicina tradicional como parte de la oferta de atención médica pública fomentando su práctica.
Y si querés conocer más sobre esto solo tenés que visitar en Diriomo a nuestros chamanes, guías espirituales o médicos naturistas, conocidos así en la actualidad. Podés visitar a doña Andrea Peña, Nora Castellón, Roger Barrera, y a don Antonio Castellón, reconocidos curanderos locales.
Danzas y música
En Diriomo, al igual que los pueblos de Granada y Masaya, sus danzas y música son una expresión cultural que forman parte del ritual litúrgico y de las celebraciones de las fiestas patronales y tradicionales.
Las Inditas es uno de los bailes que acompaña estas fiestas, y está representado por diferentes grupos folclóricos del municipio. Los artistas participantes lo hacen movidos por la fe y la devoción o por promesas a los santos por los favores recibidos durante el año.
Arte
Para conocer la piedra inerte y que cobró vida, podés visitar el taller de escultura de don Pío Suazo. Su habilidad está en esculpir la piedra de cantera blanca, con sus manos mágicas le da vida a la piedra a través del tallado y modelado. Ha elaborado bellas obras de imaginería religiosa popular, inspirándose en las esculturas y los altares de las iglesias.
Estas obras las podemos ver expuestas en la iglesia de Diriomo, Diriá, y en otros municipios como Santa Lucía, San Lorenzo y Santo Domingo, tradición que ha transmitido a sus hijos, quienes hoy también son conocidos en el arte de esculpir la piedra.
También elaboran candelabros, pilas bautismales, altares para iglesias, astas para banderas, portales de viviendas, maceteras, lavamanos y hasta pequeñas piezas de artesanía como ceniceros y piedras de moler. Con su arte han recreado la fauna de nuestro país, que ha sido fuente de inspiración para hacer las famosas esculturas de forma de sapos, leones, tortugas y conchas.
Además encontrarás en este municipio las artesanías en miniatura de resina, elaboradas por el escultor Henry Oporta Suazo. Otros artistas plásticos, especialistas en la pintura y escultura son Mario Moraga, José Abraham Pérez, Santiago Marcia y Jerry José Peña, quienes han llevado al lienzo aspectos de la cultura y la naturaleza de su municipio.
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