Parroquia de San Nicolás de Tolentino.
Templo Parroquial de San Nicolás de Tolentino: es el mejor y más bello edificio antiguo del municipio, tiene tres naves, posee un techo de dos aguas cubierto de tejas. Su fachada tiene una puerta mayor en la base de una torre central, con dos ventanas superiores.
Al interior se confeccionaron retablos de San Nicolás en presbiterio y en los laterales de la Virgen María y de Jesús resucitado.
Conserva una de las tres antiguas campanas de 1890, la cual tiene una leyenda histórica grabada y puede ser observada en el salón parroquial. El actual campanario, se empezó a construir en 1965.
La iglesia parroquial conserva en su interior el único bien mueble auténticamente colonial del municipio, la pequeña imagen de San Nicolás de Tolentino en actitud penitente que preside el retablo central del templo. La iglesia fue declarada Monumento Histórico Nacional según decreto ley en 1971.
Antigua Estación del Ferrocarril: fue fundada el 11 de julio de 1902, bajo el gobierno de José Santos Zelaya. El edificio, de más de un siglo de antigüedad, fue restaurado en el 2014 y actualmente sus instalaciones funcionan como una escuela de capacitación tecnológica. Por su antigüedad y por el importante rol histórico, fue declarado por decreto de ley Patrimonio Cultural de la Nación en 1994.
Plaza Parque Central Edgard Arbizú.
Plaza y Parque Central Edgard Arbizú: en el centro del área urbana, presenta espacios agradables para el esparcimiento de niños y jóvenes en un ambiente fresco y rodeado de vegetación.Entre las estructuras antiguas de La Paz Centro existe la casa de la familia Cárcamo y la columna decorativa que sirve de «mojón» al muro frontal de la Iglesia en su parte norte.
Ruinas de León Viejo: ubicado en el poblado de Puerto Momotombo, a 68 kilómetros de la capital, redescubiertas en 1967; es el sitio donde originalmente se fundó la ciudad de León en 1524.
En la actualidad es un lugar de interés histórico, donde podrás observar las ruinas de la antigua ciudad, estatuas de personajes de la época, restauraciones de algunos edificios como la iglesia, el volcán Momotombo y el lago Xolotlán desde la cima de la fortaleza y disfrutar de un recorrido guiado que te transporta al pasado.
Al interior de León Viejo se encuentra el monumento a la resistencia indígena, la obra representa a un indígena que está siendo atacado por perros de guerra hambrientos, por orden del gobernador Pedrarias Dávila. La escultura es alusiva al evento del “aperramiento” que aconteció en esa ciudad el 16 de junio de 1528, como castigo ejemplar por el cual 18 caciques fueron condenados en represalias debido a que indígenas rebeldes habían matado en combate a varios españoles.
El monumento de 3.5 metros de altura, fue elaborado en 2001 por el arquitecto Federico Matus con el apoyo de los artistas Sócrates Martínez, Alberto Torres Cerrato, Eddy Luz Tellería y Ricardo Gómez del taller experimental de arte monumental del Instituto Nicaragüense de Cultura, INC. El sitio cuenta con grandes y hermosos árboles que te permiten refrescarte del calor característico de la zona.
El sitio histórico Ruinas de León Viejo fue declarado Patrimonio Histórico Cultural de la Nación en mayo de 1994, posteriormente declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en el 2000.
Todo el complejo está constituido por el parque arqueológico, una sala de maqueta y dos museos. El sitio cuenta con servicio de guía, parqueo, servicios higiénicos, venta de artesanía y un pequeño kiosko de comida rápida. Se recomienda llevar ropa y zapatos adecuados para caminar, agua y cubrirse del sol. El local atiende de lunes a domingo, de 08:00 de la mañana a 04:00 de la tarde.
La típica casa de los paceños hasta mediados del siglo XIX fue el rancho de palma, la que ha sido desplazada por la casa de adobe y taquezal. Con el auge del ferrocarril surgieron nuevos modelos de casas de habitación, incluyendo elevadas construcciones y aprovechando la buena calidad de madera, con techos de teja rústica local.
Las divisiones del espacio incluían traspatio, cercados de piedra pómez, la separación de la sala y dormitorio colectivo por tabiques de madera y las paredes lisas pintadas con cal, definen la casa típica modelo de hace más de un siglo. Para casas esquineras se plantaba un pilar en medio de las dos grandes puertas laterales.
La casa de María Luisa Espino representa la construcción de finales del siglo XIX, la que se conserva sin modificaciones significativas.
Mapa de la Oferta Turística