La conquista española, por medio de los misioneros, logró permear la sociedad local hasta el siglo XVII, sin embargo, el núcleo del pueblo indígena sigue activo, en su organización y tradiciones, aunque la lengua ancestral se extinguió hace unos 40 años.

Traje típico de Matagalpa

En 1538 la Corona Española creó el Corregimiento de Matagalpa, dentro de la división territorial y administrativa de la Capitanía General de Guatemala. Fue elevada a villa en 1851, y el 14 de febrero de 1862 se le concedió la categoría de ciudad.

El carácter altivo y rebelde de sus pobladores ha marcado importantes eventos de la historia nacional, como en la Batalla de San Jacinto, el 14 de septiembre de 1856, donde un grupo de 120 indígenas de las cañadas de Matagalpa jugaron un papel decisivo en el triunfo contra los filibusteros que pretendían apoderarse de Nicaragua.

Los pobladores actuales son gente sincera, simpática, trabajadora y orgullosa de su legado histórico cultural.

Tradiciones, expresiones artísticas, música y museos

El Baile de Huipil: se realiza en el contexto de las Fiestas Patrias y patronales desde hace más de 60 años. Es un evento único en el país por lo masivo de la participación de locales y foráneos.

La música, las danzas y los bailes tradicionales de Matagalpa se pueden disfrutar durante la tradicional feria del maíz que se realiza en agosto durante la cual se inserta el Festival de Polkas y Mazurcas.

En danzas hay personajes representativos, entre ellos: María Lanzas (maestra de generaciones, Ballet Folklórico Ernesto Cabrera), Farah Espinoza (Grupo Artístico Rescate Kayandara), Concepción Alarcón (Ballet Folklórico de la UNAN- FAREM), Carlos Portobanco (Ballet Folklórico Nicaragüita) y Marcos Valle (Academia de Danza Arabesco).

Edith Gron

La escultora Edith Gron (1917-1990), llegó de niña a Matagalpa desde Dinamarca, en 1923. Ella triunfó como escultora en la capital entre 1940 y 1990 y es considerada la mejor escultora nicaragüense.

Sitios de interés histórico y cultural 

Sitio Arqueológico Solingalpa: esta es una de las tres primeras parcialidades de Matagalpa y se encuentra en la comunidad de Apante Grande, la que a su vez está sobre los yacimientos de una mina de obsidiana.

Cerro La Tejerina: cercano a la ciudad de Matagalpa y ubicado a 1400 metros de altura. En sus partes altas posee un mural con grabados rupestres que representan símbolos zoomorfos y geométricos.

Cueva de los ladrones: en la comunidad de Palcila existe un abrigo rocoso en el cual los indígenas matagalpas dejaron negativo de imágenes cuyos diseños muestran manos pintadas, así como animales, formas geométricas y abstractas.

Museo Nacional del Café: creado el 22 de diciembre del 2002, en el antiguo edificio del Club de Obreros, de tres pisos que conserva los diseños en sus paredes de la época colonial. Posee siete salas museográficamente acondicionadas, que muestran documentos, fotografías y la historia del café tanto del pueblo Matagalpa como a nivel mundial. El edificio es Patrimonio Cultural del municipio.

Pintores

Leoncio Sáenz

Alberto Vogl Schedlbauer (1865-1959): gran pintor al óleo, de estilo clásico renacentista, vivió en Matagalpa donde dio clases de pintura a Yolanda Espinosa Herrera (1922), Esperanza Amador, Guadalupe Somarriba, las hermanas Rosalpina y Nieves Arnesto, quienes se convirtieron en artistas.

Otro que aportó a la pintura al óleo de Matagalpa, en los años 1930, fue Emilio Münkel. Todavía se encuentran en la ciudad cuadros pintados de su autoría. 

El maestro Leoncio Sáenz, (1937-2008), natural del Valle de Palcila, estudió en la Escuela de Artes, maestro y creador de la pintura indigenista.

Figuran también Johnny y Byron Alanís Rayo, Esperanza Amador, Donald Casco y Leoncio Sáenz.

Músicos

Humberto Arauz, Armando Morales, José Francisco Corea y otros que han contribuido a la identidad musical del municipio.

Escultores

El maestro Jesús Gutiérrez, entre los años 30 y 50, creó muchas estatuas usando la piedra gradilla de Matagalpa, algunas piezas se pueden apreciar en tumbas del Cementerio Municipal y del Cementerio de Extranjeros.

Museo Casa Carlos Fonseca Amador

: se ubica en la casa natal del fundador del Frente Sandinista de Liberación Nacional Carlos Fonseca Amador. La casa fue declarada Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación en 1981. Esta pieza antigua se encuentra en el barrio Laborío.

Museo del Pueblo Indígena: ubicado en la antigua casa de adobe y madera donde los indígenas que bajaban de las cañadas se cambiaban de ropa para hacer sus gestiones en la ciudad. En una amplia sala se presentan objetos relativos a la arqueología, a las tradiciones y las artesanías de las comunidades indígenas locales.

También visitá el Monumento a los Héroes y Mártires, el cerro El Calvario, el muro del Convento de los Jesuitas (hoy contiguo a la cancha El Brigadista) y la casa de Bartolomé Martínez.

Artesanías

Cerámica negra

Habiendo nacido en Matagalpa, cuando Matagalpa y Jinotega eran un solo distrito septentrional, la cerámica negra de Matagalpa conserva su elaboración artesanal y precolombina. Hasta 1980 en los distritos y escuelas de Matagalpa se enseñaba la fabricación de la cerámica negra, actualmente solo la familia Rodríguez se dedica a su elaboración.

Esta labor artesanal, de tradición indígena, originalmente de Jinotega fue trasladada en 1942 a Matagalpa por la familia Pineda. El color característico del barro es conseguido gracias a que las vasijas recién horneadas, estando al rojo vivo se colocan junto a colochos de madera de cedro o de pino. El vapor caliente y la resina manchan la superficie del barro de color negro azabache.

La industria textil tradicional se conserva en la comunidad autóctona de El Chile, donde existen talleres familiares de mujeres que tejen con la antigua técnica indígena del telar de cintura. Los bienes elaborados son coloridas telas de algodón que se decoran con motivos locales y colores primarios. Entre los productos están carteras, monederos, centros o caminos de mesa, bolsos, manteles, entre otros.

La cestería es parte de las artesanías, principalmente para la elaboración de canastos anchos y largos hechos de fibra de bambú que son usados en los cortes de café. Son hechos en las comunidades cercanas a las haciendas cafetaleras.

La elaboración de sombreros de fibra vegetal es parte de la tradición en las comunidades indígenas de Quebrada Honda y San Pablo.

Oficios o prácticas tradicionales  

Cortador de café

El oficio de cortador de café, a pesar de ser una ocupación de temporada, es una actividad que moviliza muchas personas en grupos familiares y que dinamiza la economía de todo el municipio.

Los patieros son personas de ambos sexos que aseguran la eliminación del exceso de humedad en los granos del café, cuando lo cosechado llega mojado, lo distribuyen en patios embaldosados para exponerlos al sol. Durante este proceso son responsables de mover los granos con rastrillo de madera. En las noches y en caso de lluvias deben cubrir el café con plástico. Esto debe hacerse antes del secado y el trillado.

Escogedoras: es un oficio reservado a las mujeres, quienes son las responsables de seleccionar los granos de café eliminando los granos malos o defectuosos después del trillado.

Los catadores de café son personas capacitadas y dotadas de una particular percepción sensorial del paladar. Ellos asumen la responsabilidad de seleccionar las muestras de café preparado. La selección se realiza por medio de la cata de café, que permite descubrir los matices aromáticos y saborizantes de las variedades de café y tomar decisiones en la valoración para poder elegir.

El oficio de “compone huesos” o “sobadores” son personas tradicionalmente de sexo masculino que ofrecen servicios de masajes orientados a corregir torceduras y esguinces. También alivian contracturas y dolores musculares.

Catador de café

Parteras o comadronas, son las mujeres que aconsejan y asisten a las mujeres embarazadas en el proceso del parto.

Los curanderos son individuos que dominan, conservan y practican los saberes de la medicina natural. Esta práctica aún se usa en las comunidades del Jucuapa y Liliste.

La carpintería y la ebanistería son oficios tradicionales, que se dedican al trabajo de la madera y construcción de muebles.

Tradición oral

La serpiente de Apante atada con los tres pelos de la virgenes un mito indígena relacionado con la adoración de la serpiente, que los jesuitas adaptaron para que los indígenas relacionaran la historia con elementos cristianos.

Se cuenta que en el cerro Apante habita una gran serpiente, a la cual la Virgen la tiene amarrada con tres de sus cabellos. Esa serpiente tiene la cabeza enterrada en la laguna del cerro, la panza en la comunidad indígena y la cola en la Catedral. Los movimientos de la serpiente han reventado dos cabellos, quedando solo uno. Por lo tanto en el momento en que se rompa el tercero la ciudad será inundada.

Galería de Imágenes

Mapa de la Oferta Turística

2023-01-24T17:32:48+00:00

¡Comparta esta información en su red social favorita!

Go to Top