Luego de pasar una etapa de poblamiento que data de los años 1930 tras el auge de la extracción de la resina del árbol de hule, las minas y la explotación forestal en su territorio, dando origen a migraciones desde otros lugares de Nicaragua, Wiwilí fue elevado a categoría de municipio en 1989. Cebe resaltar que en las zonas aledañas al Río Coco están asentados poblados miskitos y mayangnas.
Taller de talabartería
Este municipio comparte con su vecino Wiwilí de Nueva Segovia el título de «Cuna del Cooperativismo», pues en 1933 el Héroe Nacional, General Augusto C. Sandino, fundó la primera cooperativa agrícola llamada “Cooperativa Río Coco”; formada por campesinos desmovilizados de su pequeño Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua, EDSN, pero grande en sus ideales, coraje y convicciones revolucionarias.
En este territorio se encuentran abundantes vestigios arqueológicos, lo que indica que estuvo poblado por grupos indígenas en épocas prehispánicas.
Sobresalen sus petroglifos, como los encontrados en la llamada Casa de Piedra, Comunidad Las Pintadas o los de Caballo Blanco, bienes de alto valor patrimonial, vestigios de una cultura milenaria ancestral, que hoy forma parte del patrimonio cultural de nuestro país.
La Cueva Casa de Piedra, es un abrigo rocoso, que mide 30 metros de largo por 15 metros de altura y 3 metros de fondo. En la parte inferior izquierda de la cueva, hay petroglifos con figuras antropomorfas y zoomorfas, así como figuras abstractas y geométricas.
Por las características paisajísticas y de altura,con vistas panorámicas espectaculares, se puede inferir que fue un santuario para ceremonias y rituales que hacían los grupos indígenas procedente de la etnia matagalpa hace miles de años.
Los petroglifos La Pintada indican la presencia de asentamientos humanos en la zona que dejaron su huella y testimonio de prácticas sociales y culturales. Aquí podrás realizar recorridos por la zona de petroglifos, disfrutar el paisaje y tomar fotografías, también podés visitar las rocas El Subterráneo
Para llegar a los petroglifos debés tomar un bote desde Puerto Lindo hasta la comunidad Las Pintadas, lo que se convierte en toda una aventura mientras observas la flora y fauna en el recorrido.
Expresiones artísticas
Se destaca el grupo musical campesino Los Ásperos de Wamblán, y otros grupos se destacan en esta zona, también músicos solistas que tocan la guitarra, escriben canciones y poemas, como Matilde Quemado, el Indio Machetero, Aristeo Salgado, conocido como El Mágico, son los más conocidos en el municipio y se le conoce por sus apodos y no por su nombre. Son de la comunidad El Maleconcito.
En el municipio hay dos grupos de danza integrados por jóvenes de la localidad, uno es el grupo Yaslan que significa vientos del norte en vocablo miskito. Y el grupo Tangnika Baiwaia que significa Florecer. Predominan todavía danzas y música miskita en el municipio.
Pintores, Julio Barahona, Francisco Quiroz y Noel Borges.
Escritores, Marvin Úbeda Olivas y Oscar Herrera Blandón.
Artesanías y oficios artesanales
En la comunidad El Jicote, hay mujeres artesanas que elaboran cerámica utilitaria en barro, principalmente comales, ollas y tinajas. La más conocida es doña Gregoria Monzón, a quien se puede visitar y conocer las técnicas ancestrales de preparación del barro, y la elaboración y quemado de las pieza de cerámicas que elaboran.
También en las comunidades Kitriz y Las Vueltas Kilambé se elaboran canastos para las cortas de café
El Taller de Artesanía y Manualidades está ubicado en la comunidad El Jicote, trabajan con materiales como plástico, lana, manila, macramé, camba, hilo la espiga, entre otros. Hacen productos variados, vestidos de niñas, gorros, zapatitos, mantelitos, bolsos y bisuterías como como pulsera, collares aretes, canastos, bolsos, fajas, hamacas y otros. Este es taller es de la familia Meneses.
Taller Artesanal Tradicional La Norteña, de don Juan Ramón Meneses Valdivia y familia, con más de 35 años de experiencia de elaborar productos propios del campo como mecates, sondalezas, cinchas, gamarras, gamarrones, bozales, alforjas, forros de tijeras, sogas, mecates para pozo artesanos, hamacas, entre otros productos, elaborados en pita extra larga y pita de maguey. Está ubicada en la comunidad El Jicote, a 5 kilómetros del pueblo.
Taller de Talabartería William Castellón, elaboran monturas, albardas y otros productos propios de labor del campo. También restauran albardas y monturas. Este taller está ubicado en el barrio El Progreso.
Taller de Zapatería de Concepción Rivera Zeledón, muy conocido en el municipio, tiene muchos años de ejercer este oficio. Aquí elaboran botas, zapatos de todo tipo, para hombres y mujeres. Este taller está situado en el casco urbano del pueblo.
Taller de Herrería, ubicado en la comunidad Los Milagros. Fabrica afila y repara piochas, azadones, cobas, covines, herraduras, empalme de maches y repara. Tiene una fragua donde calienta el hierro para elaborar sus productos. Es muy conocido en su comunidad.
Taller de Manualidades de Norma Teresa Zeledón, fue maestra y ahora está jubilada. Es muy conocida y apreciada en la comunidad, confecciona con tejidos a mano ropa para niños, ropa de cama, manteles, bolsos, pulseras, entre otros productos. Vive en el casco urbano.
Taller de Carpintería de Exequiel Urbina. Acá se elaboran productos para el hogar como camas, sillas, comedores, roperos, puertas, ventanas, aparejos, sillas de aparejo y machos de las monturas. Está ubicado en el sector No.1, salida a La Joba.
Taller de Ebanistería de Antonio Rodríguez Rugama, ubicado en la comunidad El Cacao, trabaja todos los productos utilitarios derivados de madera.
Entre los oficios presentes en el municipio, podemos mencionar:
Parteras, existe varias, pero las más conocidas son doña Petronila Cordero, vive en el barrio El Chorizo, del casco urbano del pueblo. La señora Nieves Hernández y doña Alicia Rugama, ambas de la comunidad El Jicote, son muy reconocidas y queridas por su comunidad.
También existen cortadores, lecheros, ordeñadores, entre otros oficios referidos al trabajo del campo.
Personajes
Florencia Olivas García
Florencia Olivas García, mejor conocida como “Doña Lencha”, fundadora del municipio Wiwilí y de Los Boteros del Río Coco, se ganaba la vida cruzando personas de Wiwilí de Nueva Segovia a Wiwilí de Jinotega, que en aquellos años se le conocía como Jinotegüita.
El municipio de Wiwilí nació en 1972, siendo la cabecera municipal el poblado de Wiwilí de Nueva Segovia, que incluía toda el área conocida como Wiwilí de Jinotega y Nueva Segovia como territorio único.
Doña Lencha se inmortalizó al haberse convertido en la primer persona en ofrecer el transporte acuático al público para trasladarse de Wiwilí- Jinotega a Wiwilí Nueva Segovia.
En conmoración y homenaje a este personaje querido por su pueblo, se le erigió una escultura que está ubicada al otro lado del río, en el parque del municipio de Wiwilí-Nueva Segovia. Un personaje que vive en la memoria del pueblo de ambos municipios.
Juan Ramón Meneses Valdivia, artesano, persona muy conocida en su comunidad quien desde hace más de 35 años se ha dedicado a trabajar en la elaboración de artesanías propias de la labor de campo. Es una persona que se ha preocupado por su comunidad.
Actualmente es el presidente de la Cooperativa Multisectorial Productores Orgánicos de Wiwilí. Se le puede ubicar en la comunidad El Jicote o en las oficinas de la cooperativa.
Leyendas locales
Leyenda de El Kilambé, un cerro encantado.
La leyenda dice que el cerro Kilambé está habitado por reyes, entre ellos está el rey Moctezuma, mítico cacique y rey mexicano, quien huyendo de los españoles vino a Nicaragua, encontrando como mejor lugar de refugio El Kilambé.
Otra leyenda dice que dado que en el Cerro Kilambé existen numerosos árboles de naranja que producen durante todos los meses del año, las personas que las coman deberán hacerlo en el propio sitio donde las encontraron, además no deben tragarse alguna semilla, pues de lo contrario por seguro se perderán en el bosque.
Mapa de la Oferta Turística